El Manchester City no pierde pie en la Premier, donde lucha por convertirse en el primer equipo inglés que gana cuatro Ligas consecutivas. Superada la estación de Brighton, que volvió a ser balneario (0-4), le quedan cinco más para alcanzar una meta que le separa de Nottingham, Fulham y Tottenham en casa y de Wolves y West Ham en casa. Si el equipo de Guardiola suma esos quince puntos en juego, nadie podrá alcanzarlo, ni siquiera el Arsenal, que ahora le aventaja en un punto, pero ha disputado un partido más. El Liverpool es tercero, a tres puntos del líder y también a falta de cuatro jornadas, tras su fiasco de este miércoles en el Everton.
0
Jason Steele, Lewis Dunk, Jan Paul van Hecke, Valentín Barco, Veltman (Odell Offiah, min. 45), Groß, João Pedro, Jakub Moder (Igor Julio, min. 56), Carlos Baleba, Lallana (Simon Adingra, min. 45) y Welbeck (Mark O’Mahony, min. 75)
4
Ederson Moraes, Aké, Manuel Akanji, Walker (Rico Lewis, min. 78), Gvardiol, Bernardo Silva (Jeremy Doku, min. 78), Foden (Grealish, min. 71), Rodrigo (Sergio Gómez, min. 78), De Bruyne (Matheus, min. 71), Kovacic y Julián Álvarez
Objetivos 0-1 min. 16: De Bruyne. 0-2 min. 25: Foden. 0-3 min. 33: Foden. 0-4 min. 61: Julián Álvarez.
Árbitro Jarred Gillett
Tarjetas amarillas Veltman (min. 35) y Carlos Baleba (min. 76)
El City ganó con sobrada un partido que parecía incómodo por la especificidad del Brighton, un equipo que sin balón plantea duelos individuales por todo el campo y con el balón en los pies intenta buscar espacios y superioridades desde su propia área. El plan se desmanteló porque el valor del City es el del equipo que, según su guión, domina varios récords. Todo se abrió con un centro al área, un servicio de Walker que De Bruyne remató con un elegante cabezazo. plongeon. Casi de inmediato, la fortuna ayudó a Foden, que había estado en el origen del primer gol, cuando la espalda de Gross desvió hacia la red un tiro libre directo del talento inglés. Apenas pasada la media hora, el propio Foden aprovechó la presión del atrevido rival cuando el balón salió por detrás para volver a marcar. Juntó pases en una zona sensible para el Brighton, al que algún astuto podría haber dicho “¡cuánto daño le ha hecho Guardiola al fútbol!”. La pelota a veces cierra círculos extraños.
El caso es que el Brighton mantiene la mayor regularidad de su historia porque el técnico Roberto De Zerbi interpreta un marcador que premia más que castiga. Para darle una paliza nadie está mejor preparado que Guardiola, cuya plantilla interpretó correctamente cada momento del partido. Y además, ante el brío del rival para igualar y subir líneas, el City tiene uno de los porteros con mejor pie del planeta. En el cuarto gol, Ederson actuó como registrar para colocar un pase de cincuenta metros y habilitar el desmarque del lateral Walker, quien galopó hacia el área para darle el gol a Julián Álvarez.
Ya con la sentencia, y aunque el Brighton luchaba con cierta chispa contra su suerte, Guardiola llamó a la reserva primero a Foden y De Bruyne y poco después a Walker, Bernardo Silva y Rodri. El sábado les espera el Nottingham Forest, que lucha por la permanencia.
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