Mondelez Snacking Holdings, sociedad bajo la cual la multinacional alimentaria desarrolla su actividad en España, registró a cierre de 2023 unas pérdidas consolidadas de 6,3 millones de euros, según se refleja en las cuentas anuales depositadas en el Registro Mercantil. Estas también incluyen operaciones en Portugal.
Un resultado que empeora los números rojos de 5,3 millones del año anterior. De hecho, es habitual que el fabricante de Oreo o Fontaneda registre pérdidas consolidadas en España: lo lleva haciendo más de 10 años consecutivos. Algo que tiene como consecuencia que, a finales de 2023, Mondelez presentará un patrimonio negativo de 80,7 millones. Sin embargo, la empresa presenta sus cuentas como una empresa en funcionamiento, ya que cuenta con el apoyo financiero de su empresa matriz, Kraft Foods Schweiz Holding.
La compañía explica el resultado negativo por “las amortizaciones contables del fondo de comercio de consolidación y los intereses financieros pagados como consecuencia de la importante subida de los tipos de interés”. Sin embargo, su resultado operativo también fue negativo, situándose en poco más de 800.000 euros.
En 2023, Mondelez alcanzó una facturación de 947,8 millones, un 10% más que el año anterior, la mayor desde el ejercicio 2013. De esa cantidad, 793,1 millones correspondieron a ventas a clientes, mientras que los otros 154,7 millones se catalogan como prestación de servicios a su empresa matriz.
Las galletas son la categoría con mayor peso en la facturación de la compañía, con el 38% de la misma, el mismo porcentaje que en 2022, con casi 370 millones, un 11,5% más. Mondelez vende marcas como Fontaneda, Oreo, Chips Ahoy! o Digestivo y compite en un mercado muy dominado por las marcas blancas.
La segunda línea de negocio más relevante es la de chocolates, con 225,9 millones, un 5,5% más que en 2022 y un 24% del total. Aquí Milka y Suchard son sus principales marcas.
Los quesos, donde opera a través de marcas como Philadelphia y El Caserío, generan el 18% de las ventas, cerca de 175 millones, mientras que la sección de salsas y postres, con referencias como Royal, aglutina el 7% de las ventas con 67,3 millones.
La categoría que experimentó mayor crecimiento fue la de chicles. Facturó 110,1 millones, un 22% más, hasta alcanzar el 11,6% de la facturación de Mondelez.
El año pasado, el grupo americano acordó vender este negocio en EE.UU., Canadá y Europa a la empresa Perfetti Van Melle. Por ello, afirma haber «iniciado un proceso de reorganización en España y Portugal con el objetivo de lograr una gestión y una comercialización más eficiente y optimizada, centrada en las categorías de chocolate, galletería y bollería».
Esto se tradujo en un ERE en sus oficinas de Madrid y en su equipo comercial, que acabó afectando a 51 personas. Sólo una de esas salidas fue forzada. De ellos, 37 se produjeron durante el ejercicio 2023. “Este proceso está completamente cerrado y no hay más salidas previstas a raíz del mismo”, señala Mondelez en su informe no financiero.
La compañía mantiene cuatro fábricas en España, ubicadas en Viana (Navarra), Montornés del Vallés (Barcelona), Hospital de Órbigo (León) y Granollers (Barcelona).