Laurent Cantet, director de ClaseMurió este jueves 25 de abril a los 63 años a causa de un cáncer. Así lo ha avanzado el diario francés Libération. La película, que le valió la Palma de Oro en el Festival de Cannes en 2008, le permitió alcanzar una notoriedad internacional que acompaña su carrera desde entonces. En él la historia la contaba una joven profesora de idiomas en un instituto convulsionado situado en un barrio marginal de París. Fue también el máximo exponente de un cine comprometido y valiente con el que sus títulos han reflejado las tensiones sociales de cada momento.
Fue en el taller de arte dramático que impartía en el Instituto Françoise Dolto donde conoció al profesor François Bégadeau, autor de la novela homónima que Cantet trasladó a la gran pantalla en Clase. De hecho, la película se rodó en el mismo colegio donde el profesor había dado clases, y cuyas vivencias habría plasmado en su libro.
Interpretado por actores no profesionales, el largometraje Clase Mostró con crudeza la realidad que contenían sus aulas, mostrando y reflexionando sobre cómo aprender sobre democracia podía implicar ciertos riesgos. La película recibió una nominación al Oscar a la Mejor Película en Lengua Extranjera.
Anteriormente, con Recursos humanos (1999), ganó el Premio César a la Mejor Ópera Prima y al Mejor Actor Revelación para Jalil Lespert. En él narró las peripecias de un joven de familia obrera que, tras brillantes estudios, empezó a trabajar en las oficinas de una fábrica, donde tuvo que acometer el despido de algunos trabajadores, entre ellos su propio padre. Con El uso del tiempo Ganó el León del Año en Venecia en 2001.
En su última película, Arturo Rambo, que se estrenó en 2022, reflexionó sobre las redes sociales, la libertad de expresión, la clase y la raza. Su punto de partida fue un caso real: los tuits ofensivos publicados por un inmigrante del banlieu Francés. Contexto que sirvió para formular una de las grandes preguntas del título: ¿seríamos tan tajantes si quien los publicara hubiera sido un hombre blanco rico?
La película fue una muestra más de cómo Cantet ha construido una filmografía en la que ha aprovechado cada historia para arrojar luz y hincarle el diente a conflictos como el racismo y el clasismo que imperan en la actualidad. “El cine nos permite ver esta complejidad sin dar respuestas definitivas. «No soy militante, no tengo soluciones, ni siquiera certezas, pero sí me hago preguntas sobre todo lo que me rodea», explicó a este medio durante su promoción, «la sociedad está encantada de aceptar inmigrantes, pero no va a perdonarles el más mínimo error. Se les controla mucho más de cerca”.
Cantet ha fallecido a causa de un cáncer que padecía desde hacía tiempo y cuyo tratamiento le impidió continuar con la preproducción de la película en la que trabajaba junto a Marie-Ange Lucciani, productora de Anatomía de una caída..
Captar la realidad, con todos sus matices.
Hijo de profesores, Cantet nació en Melle (Francia). Recibió su formación audiovisual en el prestigioso Institut des hautes études cinématographiques (IDHEC) – actualmente conocido como La Fémis. Se graduó en 1980 pero no fue hasta mediados de los noventa cuando empezó a dirigir. Eso sí, desde sus primeros trabajos demostró su capacidad para captar la realidad con todos sus matices, que van del ámbito público al privado, del norte al sur y del ámbito social al familiar.
Las relaciones de poder, los problemas de comunicación, la desigualdad, el turismo y la diversidad cultural han sido algunos de los temas en los que ha profundizado. Otros de sus títulos más destacados con los sanguinarios (1997), Al sur (2005) y el taller de escritura (2017).